Esta casa de verano diseñada por Andrade Morettin se sitúa a pocos metros del mar, sobre la costa norte del estado de San Pablo, un lugar con exhuberante vegetación y clima húmedo caliente. El proyecto comenzó con la idea de un gran refugio, "una cáscara" bajo la cual alojar el programa y protegerlo del sol intenso y lluvias frecuentes, sin bloquear la ventilación natural permanente. La azotea de seis metros de altura y dieciocho por ocho metros de base, fue construida utilizando una estructura de madera prefabricada con uniones de acero galvanizado. En las dos fachadas grandes de la casa, generosamente abiertas al paisaje, fueron instalados paneles de fibra de vidrio con una capa de PVC, montados en marcos de acero, pivotantes o deslizantes, con la intensión de crear una membrana externa capaz de mantener fuera los insectos, sin crear obstáculos para las vistas o la brisa del mar. Toda la construcción se eleva 75cm del suelo, apoyada sobre pilotes de concreto. Todos los demás componentes utilizados en la construcción son prefabricados y fueron montados en el lugar. El sistema constructivo adoptado, además de reducir tiempo de montaje y errores, asegura una obra de construcción seca en el sitio, con escasa generación de residuos y bajo impacto ambiental. Texto en inglés en WAN.