Felipe Assadi - La Casa Schmitz se observa como una pesada caja de hormigón que es sustentada por un liviano cuerpo de vidrio, ambos elementos haciendo equilibrio sobre un par de rieles de hormigón en medio de un campo de frutales, algo que quizá interrumpe la lógica de los materiales, pero que a su vez potencia la idea de liviandad sobre el terreno. Los materiales utilizados son preferentemente hormigón y vidrio. Algunas zonas del cuerpo vidriado que son estructurantes fueron cubiertas con madera de alerce, un árbol nativo que envejece con color plata brillante.
Felipe Assadi - La Casa Schmitz se observa como una pesada caja de hormigón que es sustentada por un liviano cuerpo de vidrio, ambos elementos haciendo equilibrio sobre un par de rieles de hormigón en medio de un campo de frutales, algo que quizá interrumpe la lógica de los materiales, pero que a su vez potencia la idea de liviandad sobre el terreno. Los materiales utilizados son preferentemente hormigón y vidrio. Algunas zonas del cuerpo vidriado que son estructurantes fueron cubiertas con madera de alerce, un árbol nativo que envejece con color plata brillante.